Esta semana Dick Feynman la ha pasado en una bonita playa del sur de España. No es la playa de Copacabana la cual observaba desde la planta 13 del Hotel Miramar en sus años de enseñanza -y samba- en Brasil pero no desmerece en absoluto.
Ya. Sé que Dick dejó de existir hace 29 años, 6 meses y 12 días, pero ha estado en mi mente estos días mientras leía con gran interés sus magníficas anécdotas y vivencias. Así, que en cierta forma, Feynman ha estado esta semana en la playa conmigo.
Un placer haberle conocido Dr. Feynman.