No sé cuantas veces habré oído/leído esa frase por parte de un padre o madre orgulloso. Pues es mentira. Tú hijo será lo que los amigos, la televisión, el youtuber de turno o el hijo del vecino quieran. Será su entorno el que lo moldee y esa necesidad tan humana de encajar con los demás.
¿No te lo crees? Pues te recomiendo que conozcas el experimento que hizo al respecto el psicólogo Solomon Asch en 1951.